La decoración en las casas antiguas de la gente humilde nunca llegó a rango de ciencia, nuestros abuelos se tenían que conformar con cuatro cosas, dos heredadas y otras dos regalos de la boda.
Así que con dos jarras y una puga para colgar las alforjas se decoraba la casa; la cocina solía ser menos austera, en el vasar aparecía el juego de platos y la loza con una puntilla de ganchillo en los estantes, y sobre la viga de la chimenea aparecían los más variados adminículos procedentes de diversas fábricas y manufacturas.
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Las cosas de antiguamente.
Ya no quedan muchas, las casas viejas o se tumban o se caen solas, a ver si conseguimos hacer un buen conjunto de fotos de casas viejas y cacharros de antaño...
esa llave que bueno y la pera ....
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